viernes, 14 de agosto de 2009

Agosto

En está noche tan densa cuando el frío me adormece los huesos y no existe razón que me caliente el alma recuerdo una canción. Comienzo a tararear lo que recuerdo de ella sin seguir la melodía original, cambiando el ritmo y las notas, adaptándola a mi rítmica, haciéndola mía. Poco a poco va creando historias con imágenes sin sentido, irreales, fugaces y cambiantes. Tan cambiantes como mi humor, como mi verdad, como mi canción.

En medio del estribillo, apareces y desapareces tu, como sueles hacer. Intento dejar de tararear y cantar mi canción pero desapareces cuando entre dientes intento decir tu nombre. Sólo me queda recitarla en mi mente, teniendo la ilusión de que aún puedes adivinar mis pensamientos sólo con verme, de lejos y borrosa. Y así comienzo con mis frases sin sentido, tan cursi como suelo ser, tan ciega como me convirtió tu fantasía, tan ilusa como me conociste.

"Cuando nos volvamos a ver de un día normal pasará a ser el más deseado e intenso; esperando que ese día te haré saber con un beso que eres mi complemento y juntos buscaremos los sentimientos más tiernos y verdaderos para que con el pasar del reloj los usemos en crear nuestro propio mundo, dónde mirarnos es el deber favorito y anochecer tan cerca con sus ojos contemplándome, susurrándome que no quieres perderme de nuevo, prometiendo una vez más dejar mi yo superficial, mi yo egoísta y egocéntrico para entregarme a ti, afirmando que dejé de ser mía, gritando que te pertenezco."

Terminó mi canción y no volviste a aparecer, quiero pensar que ya no puedes descifrar mis movimientos como solías hacerlo o tal vez mi canción se ha tornado tan confusa que no puedes entenderla. Tal vez si la oíste pero pensaste que era demasiada responsabilidad para alguien que sólo busca jugar, sin prisa y sin lazos. O, peor aún, te dejaste guiar por los otros que te agobian con historias de amor rotos, de engaños y torturas, que no creen que estás enamorado mas bien piensan que es otro pasatiempo y tus sentimientos son inventados.

Tantas razones. Sólo quiero pensar que tal vez será en otra noche.